Comentario
Cotzumalhuapa, en la llanura costera de Guatemala, es un centro ceremonial que consta de 4 grupos principales que contienen 17 pirámides, además de plazas y patios recubiertos de piedra y estuco, organizados urbanísticamente según cánones que recuerdan la Ciudadela de Teotihuacan, el Sistema M de Monte Albán y la planificación de Xochicalco; modelos que se imponen en Mesoamérica desde finales del Clásico Temprano.Esta concepción urbanística internacional coincide con la presencia de rasgos y elementos del área maya, Veracruz, Monte Albán y Teotihuacan, evidenciando el intercambio constante de información que debió existir entre las elites del Clásico Medio (500-700 d. C.).Santa Lucía Cotzumalhuapa, un centro que controló una región de ricas plantaciones de cacao, además de las influencias externas ya mencionadas, manifiesta un estilo regional que se caracteriza por la talla de grandes estelas en las que representaron escenas narrativas del juego de pelota relacionadas con el sacrificio humano por decapitación y con el culto al sol. Por otra parte, el arte de Cotzumalhuapa, que tiene claras conexiones con los motivos incluidos en los paneles de los juegos de pelota del Tajín, recoge aún diseños procedentes del antiguo arte de Izapa, y una tradición escultórica en bulto redondo que incluye deidades, cráneos y cabezas de serpiente.Los jugadores representados en las estelas tienen cuerpos muy alargados y distorsionados; y muestran poca dedicación al tratamiento de las manos y los pies, apareciendo, al igual que ocurre en otros sitios de Mesoamérica, con su equipo básico de yugos, palmas, hachas y guantes.Estas tallas se acompañan de glifos colocados en cartuchos circulares de estilo nahuatl, lo cual ha llevado a algunos investigadores a relacionar las poblaciones que desarrollaron este estilo regional con los grupos pipiles del Centro de México. También gran parte de las deidades que hacen su aparición en las estelas tienen origen mexicano, como Xipe Totec, Ehecati, Tlaloc y Quetzalcoatl, documentando el intenso intercambio cultural a que se ve sometida la región, y los estilos regionales de arte ecléctico propios de muchos centros de este período, como en Cacaxtla y Xochicalco.